Ingredientes (para 12 croissants pequeños):
- Un pack de 2 láminas de hojaldre fresco (del que sí que sube, no confundir con la pasta brisa).
- 4 salchichas bratwurst, o de las que son así bien hermosas. Las que son de tipo coctail tienen el tamaño ideal, pero son más caras y en este caso no valen la pena.
- Un huevo.
Qué te hace falta:
- DELANTAL!!!
- Horno y manoplas para no quemarte.
- Papel vegetal, si tu pack de hojaldre no lo lleva incluido (el de Mercadona sí).
- Un cuchillo, un cuenquito pequeño, un tenedor y algo con lo que pintar con huevo.
Cómo se hace:
- Precalienta el horno a 200º unos 10 minutos. Cada horno es un mundo.
- Saca de la nevera las dos hojas de hojaldre, y mientras esperas a que se atemperen un poquito para desenrollarlas bien sin romperlas, en el cuenquito bate el huevo con el tenedor.
- Desenrolla las láminas de hojaldre y ponlas sobre papel vegetal.
- Realiza estos cortes en el hojaldre (ojo a la calidad conmovedora del dibujo Paint):
- Don't panic! Primero haz los tres tajos verticales, luego las tres diagonales, y por último los cortes pequeñitos. No te ansies a apretar el cuchillo que no hace falta, a ver si vas a romper el papel vegetal o a hacer un empastre en la mesa.
- Ahora, tienes que cortar cada salchicha en 4 trozos. Primero la partes por la mitad, y luego cada mitad por la mitad. Obtendrás 4 salchichitas de tamaño coctail.
- Coge una mini salchicha y colócala en el medio de cada triángulo, justo tocando el borde del corte pequeño. Si la salchicha te asoma por los lados del triángulo no pasa nada, eh?
- Enrolla sobre sí mismas cada una de las patitas del triángulo, haciendo dos rulitos. Serán los cuernos o patitas del croissant.
- Sigue enrollando el resto de la masa, con la salchicha dentro, hasta llegar a la punta del triángulo. No hace falta apretar, con deslizar la mano por encima se enrolla solo.
- Haz lo mismo con todos los triángulos. Es chungo de explicar, pero de verdad que lo harás todo mientras se precalienta el horno.
- Cuando los tengas todos, disponlos bien repartidos sobre el papel de horno para que no se toquen entre sí cuando el hojaldre suba.
- Píntalos (yo uso un pincel de silicona del Consum, los del Carrefour y del Ikea también van genial y son baratísimos) con huevo por la parte de arriba.
- Mételos en el horno a 200º, calor arriba y abajo, durante 15 o 20 minutos, hasta que estén doraditos. Ojo no se te quemen! Como siempre, si es la primera vez que los haces, no te despistes mucho.
- Cuando estén listos, los coges con cuidado de no quemarte (abrasan!) y los pones sobre una rejilla a enfriar. Yo uso la del horno: la pongo encima de la mesa, y encima los croissants.
Te los puedes comer calentitos recién hechos o fríos, están demasiado buenos. Duran bien un par de días, en invierno hasta 3. Pero no durarán tanto. Si te vienes arriba puedes envolver la salchicha en una laminita de queso, y ya es gozo supremo.
Que pintaza, hacer la masa del curasán me parece complicado, pero tiene que estar tan bueno... *o* (con esa loncha de queso extra ya muerte directamente)
ResponderEliminarHacer la masa es muuuy laborioso, pero con la comprada salen la mar de ricos también, y no da pereza ^__^
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