Arroz de Araceli

Hola!

Cuando mi amigo Busito me ha dicho que está malo de la tripa, automáticamente le he dicho que se haga Arroz de Araceli.

• Y eso qué es? Pues es un arrocito que todo lo puede y todo lo cura, amor y estabilidad estomacal en tu plato.
• Y Araceli... era la dulce abuelita de Letrado. Una señora de Albacete capaz de caerse de la burra en un día de nieve, romperse una pierna, e irse a trabajar al campo como si nada. Una señora capaz de dejarlo todo por amor, cambiar de provincia y empezar desde cero. Vamos, un peazo señora, que por desgracia no tuve el placer de conocer en directo, pero a la que he llegado a querer como si fuese mi yaya.

Entre sus muchas recetas, que ya iré recopilando como pequeño y sincero homenaje, la que me ha sacado de más apuros (y lo dice alguien con procesos digestivos... "creativos") es su arrocito.

Ingredientes (para una persona):

• Aceite de oliva (que no sea de una calidad conmovedora, pero tampoco aceite de motor)
• Una patata pequeñita
• Un diente de ajo (o dos si te gusta) sin pelar
• Dos puñados de arroz (del redondo blanco normal: ni integral, ni basmati, ni nada)
• Una hoja de laurel (que no te dé pereza comprarlo, se usa para muchas cosas)
• Agua
• Sal

Para cocinar necesitarás:

• Un perol, o bien una olla, o un cazo... y a muy malas hasta puedes usar una sartén (cuando uno esta con diarreas tampoco hay que ponerse exquisito)
• Tabla de cortar, cuchillo... cosas básicas, vamos

Cómo se hace:

• Pelas y lavas la patatita y la cortas en cuadraditos pequeños. Acabarás antes (no creo que tengas muchas ganas de estar de pie) si la cortas a lo largo, y cada mitad también a lo largo. Te saldrán 4 "bastoncitos" de patata. Ponlos juntos y así puedes cortarlos todos a la vez, obteniendo rápidamente cuadraditos pequeños.
• En el perol a fuego medio pones una gotica de aceite de oliva, y echas las patatas, removiendo bien para que no se pegue (porque apenas hay aceite).
• Cuando veas que ya no está cruda, pero tampoco cocinada del todo, echas el diente de ajo con piel. Lo pones con piel porque así luego es más fácil encontrarlo luego y quitarlo. No querrás comértelo pensando que es un inocente trozo de patata.
• Sigues removiendo y echas los dos puñados de arroz. Un puñado de arroz se obtiene metiendo la mano en la bolsa (o en mi caso bote, porque tengo las manos grandes y no me cabe la mano en la bolsa, así que lo vacío en botes), y cerrando el puño alrededor del arroz. Sólo tienes que echar lo que te quepa dentro, y si quieres, un poquín de extra. Pero según el hambre que tengas.
• Remueves y remueves, y una vez todo rehogadito, echas agua del grifo hasta cubrir el arroz y lo demás. Aquí hay varias opciones: si tienes tapa, así ya va bien de caldo si pones fuego suave. Si no tienes tapa, perderás agua con la evaporación, así que pon un poquito más. Cuando lo hagas varias veces y le pilles el truco, ya podrás hacértelo más o menos meloso, a tu gusto.
• Echas la hoja de laurel y un poquito de sal, y que haga "chup chup", removiéndolo con cuidado de que no se nos pegue nada al fondo del perol, y que no nos quedemos sin agua antes de tiempo.
• Cuando pruebes el arroz y veas que está hecho, vuelcas todo en un plato hondo y con cuidado de no quemarte quitas la hoja de laurel y el diente de ajo. Si estás realmente pocho hasta te lo puedes comer dentro del perol, para fregar menos. Pero hay que comérselo despacito!

Por cierto, aunque suene a comida asco del hospital, y sea una receta estupenda para cuando uno está malito, o te ha bajado la regla y te da angustia la vida entera... he de reconocer que me está tan bueno que muchas veces me lo he hecho estando completamente bien, sólo por el gusto de comérmelo. Además, es una comida que aguanta estupendamente en el tupper y te da sabor a "abuelita y a casa" aunque tengas que comer de pie y en 5 minutos.

Ponte bueno pronto Busito!